Querido cuaderno de Bitácora, septuagésimo cuarto día de una nueva vida.
Mi Diario, desde el último día en el que escribí, pocos cambios por mi parte han acontecido. Mis molestias siguen parecidas, quizás me duelan menos los talones, pero pocos cambios. Por otro lado vivimos tiempos difíciles. Vivimos con preocupación la situación que a nivel mundial está pasando por el COVID, pero en especial lo que pasa en España. Donde tenemos a nuestros familiares y a la mayoría de nuestros amigos. Días difíciles los que se están viviendo allí, donde por el bien de todos se han tomado medidas que casi todos comparten. Ojalá, de verdad, en pocas semanas se vaya viendo que van funcionando las medidas adoptadas. Lo deseo de todo corazón.
Aquí en Suecia, vivimos más o menos en un régimen de semi-cuarentena. Tenemos permitido el salir de casa, pero en la práctica solo lo hacemos en el día a día para acompañar a los grumetillos al colegio y traer de vuelta a Gadea. Y poco más. En el fin de semana solemos alquilar un coche para irnos a algún sitio poco concurrido para que nos de el aire. Ayer, por ejemplo, estuvimos en el Parque Nacional de Tyresta donde dimos un paseo de unos 5 kms, prácticamente solos, nos cruzamos con muy poca gente.
Desde el punto de vista del dichoso COVID, aquí en Suecia, vivimos una situación un tanto extraña, pues el Gobierno siguiendo los consejos de la Autoridad de Salud Nacional va aplicando medidas poco a poco, pero nada comparado con las aplicadas en España. Cierren de colegios de secundaria y Universidad, prohibición de reuniones de más de 50 personas, servir comida en las barras de los bares y poco más. Eso si, llevan animando a la gente de más de 70 años a quedarse en casa, los supermercados por ejemplo, les abren antes del horario normal para que puedan acceder sin gente. Se anima a la población a tele-trabajar, no desplazarse el fin de semana por el país. Pero de momento poco más. Cada semana que pasa se introduce algo nuevo. Os iré contando.
Como yo debido a mis molestias no puedo correr aún, pues llevo ya dos días practicando ciclismo con la bici, pero en casa. No es momento de salir a la calle, más que para lo imprescindible y poco más. Espero que poco a poco, consiga ponerme en forma. Pues el hecho de estar casi el 100% del tiempo en casa hace muy difícil el poder no estar picando todo el día.
Y mi querido Diario, no te cuento por hoy nada más. Espero en unos días volver a escribirte y pueda decirte que la situación ha mejorado, al menos en España.
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