Querido cuaderno de Bitácora, décimo sexto día del tercer viaje.
Esta noche he vuelto a dormir bien. Muchas horas y descansando. Más o menos desde las 21.45 hasta las 6.30. No sé si por haber andado mucho ayer además de ir a la oficina en bicicleta, o no tomar Prednisona esta semana o todo junto. El caso es que está muy bien.
Hoy iremos a dar un paseo tras dejar a los grumetillos en la escuela. Y después como todos los martes, hacer la colada de sábanas en la lavandería común. Después lo clásico de comer, hacer cosas y recoger a Gadea.
Esta semana, la tercera del viaje, es como os dijera siempre, la más tranquila.
Otra de las cosas que quería mencionarte, mi Diario, son los efectos secundarios que voy teniendo debido a todas estas pócimas recibidas en alta mar y en tierra. Los más evidentes son los físicos externos que la gente puede ver. Caída del pelo, desde el día 13 del primer viaje, incremento de volumen y peso (hincharse). Estos son los más evidentes. Pero por otro lado, aunque los llevo bien, recomiendo a la gente que evite esas típicas frases que no ayudan, como «es temporal», «en unos meses el pelo vuelve y más fuerte», «cuando no haya medicina, el cuerpo vuelve a lo de antes», etc. Eso no suele ayudar, pese a que las hemos dicho alguna vez o las hemos oído muchas veces. Otros efectos que suele haber, y de los que creo que me he librado son las típicas náuseas, vómitos, pérdida de apetito, etc. Esos debidos, creo yo, a otras pócimas maravillosas, no los he tenido.
Luego podría haber muchos efectos secundarios a corto plazo que, al menos, tengo yo. Mayor sensibilidad en los dientes, nunca la tuve antes. Pérdida seria de sensibilidad en las yemas de los dedos de las manos. De momento bajo control, pero si va a más, se interrumpirán algunas medicinas, me han dicho. Pérdida de visión de lejos, no es permanente, pero es como que el ojo no reacciona como antes, con lo que en general de lejos veo algo menos. Uñas más duras. Mayor sequedad en la boca, con lo que mayor facilidad para tener yagas, esto lo combato con agua con bicarbonato. Y las ya mencionadas de los dolores fortísimos en huesos en la semana de las inyecciones G-CSF. Otro efecto, que de verdad no me preocupa, pero ojo, es el primero que te comentan antes de empezar es que debido a las pócimas, te puede provocar infertilidad.
Este es un breve resumen de las cosas que se «reciben de regalo» para que mi «amigo» ya no esté conmigo. De los posibles efectos secundarios a largo plazo, mejor no mencionarlos, pues no son 100% seguros, sino posibles. Si aparecen, pues ya se les dará cuidado.
Y mi querido Diario, por hoy creo que nada más.
Debes ser identificado introducir un comentario.