Querido cuaderno de Bitácora, vigésimo día de una nueva vida
Ayer mi Diario, fue un día especial en mi vida. Te reconozco que aunque hace un par de meses ansiaba estar trabajando y de un tiempo a esta parte menos. Hoy he sentido algo especial. Te reconozco que cruzar la puerta del garaje para aparcar la bicicleta fue algo muy mágico, maravilloso. Y qué decirte cuando al cabo de un rato de estar sentado me dicen de tomar un café y me encuentro con una tarta y un cartel de bienvenida. Gracias amigos. No sabéis qué ilusión me ha hecho. Y luego por la tarde en la estafeta de correos recogí muestras de ánimo y cariño de familiares y amigos. Os agradezco mucho que os preocuparais de mi. Mi Diario te puedo decir que el primer día ha estado muy bien. No ha sido especialmente cansado. Creo que mi cuerpo físicamente está bien. Veremos cómo acabo al final de la semana.
Hoy mi Diario, toca seguir con la rutina de poner el desayuno a los grumetillos, llevarlos a la escuela y pedalear hasta el trabajo. Allí en el trabajo seguir poco a poco cogiendo el ritmo. Y ya por la tarde volver a casa y descansar.
Y Hoy mi Diario se celebra el día mundial contra el cáncer. Es por ello que animo a todo el mundo a que al menos se haga donante de médula. Pensemos que con un gesto tan pequeño cuántas cosas grandes o enormes se pueden hacer. Pensemos en la gente que necesita un trasplante de médula ósea. Yo he tenido la suerte de no necesitarlo de momento.
Mi Diario, mañana seguro que algo más.
Debes ser identificado introducir un comentario.