Querido cuaderno de Bitácora, décimo séptimo día del quinto viaje.
Ayer el reencuentro con la familia fue algo maravilloso. En estos meses han pasado tantas y tantas cosas que parece que ha pasado una vida. La cena de Navidad fue algo maravilloso. Cenar con los tuyos es algo especial.
Hoy es el día de Navidad. Día en el que los grumetillos abrirán los regalos que Santa Claus o Tomtem les ha traído. Día de ver caras de felicidad en sus rostros. Después, por la mañana, nos iremos a dar un paseo. Pero este día, el paseo no lo daré yo solo. Iremos Marta, y mis hermanos Eva y Mario y Susana. Un paseo por las islas de aquí al lado. Enseñándoles nuevas zonas a ellos.
Después del paseo supongo que será tiempo de preparar la comida de Navidad con viandas traídas de España. Lechazo que asaremos y degustaremos junto con un gran vino de Valladolid.
Y tiempo de pasar con la familia y dar una vuelta por el centro para que nos dé el aire fresco. Y mi querido Diario, mañana más.
Que pases un gran día Nacho