Querido cuaderno de Bitácora, décimo tercer día del segundo viaje.
En la tarde de ayer salí a dar un paseo para poder despejar la mente un rato. Nada de distancias largas como venía haciendo con paseos de 12 kilómetros. Esta vez fueron algo más de 4 kilómetros, ideal para ver que el cuerpo estaba bien y no quedaban dolores que incapacitaran moverse. Solo alguna molestia, similares a las que tuve hace 3 semanas cuando sufrí el episodio de dolores con su visita al KS.
Luego ya preparamos la cena y se fueron todos a la cama, quedándome solo yo haciendo deberes pendientes. Luego turno de ver un poco de series y dormir. En cuanto al sueño, pues es con diferencia la noche que más he dormido, desde hace días o semanas, unas 8 horas. Solo un rato de desvelo, que aproveché para seguir leyendo la novela de Felipe II, el rey Imprudente.
La mañana se ha levantado con algo de nubes, pero sin amenaza de lluvia, con lo que haremos cosas y por la tarde, este grumete quedará con un amigo para dar un paseo andando, corto y en calma. Para la prueba del lunes, PET/TAC, en las 48 horas previas no se debe entrenar, así que hoy y mañana días de relax en lo que a grandes caminatas se refiere.
La tarde como las clásicas de siempre de preparar la merienda, cena e irse a dormir para mañana arrancar el décimo cuarto día de este segundo viaje, de esta increíble expedición.
Y Querido diario, algo más tendremos mañana de novedades respecto a lo que pase hoy.
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